Una pregunta totalmente válida para reflexionar en estos tiempos.
Nos preocupa que nuestra paciencia se agote ante todas las demandas, pero lo cierto es que en nuestro rol de padres no estamos tampoco en nuestro mejor momento, por lo cual nuestros hijos están teniendo una paciencia excepcional con nosotros, aunque no lo notemos en seguida.
Todos estamos más irritables, desestructurados y con mucha incertidumbre y ansiedad. Esto no sólo aplica para los adultos. Nos hemos tenido que adaptar a nuevas maneras de hacer las cosas, de convivir, buscando espacios para ser diferentes a lo que conocíamos y pues nuestros niños no están exentos.
Y es allí donde nos enseñan la Paciencia. Esperan pacientemente a que llegue el momento en el que finalmente puedan salir a jugar, al parque con el vecinito libremente, nos tienen paciencia mientras hacemos tele-trabajo o hacemos los quehaceres del hogar mientras estamos con ellos físicamente pero no necesariamente emocional y psicológicamente presente ya que nos centramos en las diversas preocupaciones que trae toda esta situación 6 nuestro estado de ánimo varía constantemente día a día y semana por semana. Definitivamente no tenemos la misma paciencia que antes, cuando la escuela los retenía durante 4 o 5 horas y podíamos hacer las actividades que ahora hacemos con ellos en la casa. Ellos nos aguantan mientras nosotros nos adaptamos y ellos se adaptan. ¿No es esto digno de admirar y reconocer?
¿Qué cosas puedes admirar de tus niños durante este proceso? ¿Te han dejado alguna lección tus pequeños maestros de la vida?
Por: Nathalie De La Cruz
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